Hace ya algunos años, Raimundo y Nathalie dejaron su Venezuela natal para instalarse en la capital con la idea de que ella le sumara un doctorado a su formación. 15 años después, además del título de doctora en psicología, Nathalie también ha conseguido el de madre (de Sebastián y Camila) y el de juguetera profesional que comparte felizmente con su marido.

   Desde 2003, el matrimonio capitanea una de las jugueterías más especiales de la ciudad, si no la que más. Un lugar de cuento, de fantasía, de energía positiva y magia. Un espacio, en pleno Barrio de las Letras, donde niños y mayores se querrían quedar a vivir: “Nuestra clientela va de 0 a 99 años”, dice convencido Raimundo. “Cuando entra un niño, normalmente se le abren los ojos como en los dibujos animados y dice ¡¡¡¡¡Halaaaaaa!!!!! y cuando entra un adulto… la mayoría de las veces se emociona y otras tantas termina jugando con algo”.

   Psicóloga y músico (Raimundo es multi-instrumentalista y cantante) montaron Kamchatka porque lo tenían clarísimo: “Queríamos dedicarnos a algo que nos gustase a los dos y que fuese coherente con nuestra filosofía de vida: crecer, crear, construir”. Como los dos ya habían trabajado con niños en el pasado, sabían que faltaban “juguetes de verdad”. Se pusieron manos a la obra y empezaron a buscar proveedores europeos “sostenibles, ecológicos y socialmente justos”.

   ¿El resultado? Una juguetería, llena de esos juguetes que, desafortunadamente, son cada vez más difíciles de encontrar. Juguetes hechos con amor, con esmero y con cabeza. Juguetes que funcionan con unas pilas muy especiales: ¡La imaginación! Aquí abunda la madera, las telas, el trapo, alguna cosita de plástico (pero eso sí, reciclado 100% de cartones de leche sin tóxicos ni parabenes) y alguna otra de metal.

   Entrar en Kamchatka es vivir una experiencia. Y sus dueños lo saben. Ellos, no sólo se encargan de seleccionar los juguetes y de probarlos personalmente con sus hijos, sobrinos y amigos, sino que asesoran a los clientes indecisos. Esta pareja tiene respuesta para todo… hasta para romper clichés: “Cuando, por ejemplo, recomiendo una cocinita para un niño y el padre me increpa que eso es cosa de chicas, yo siempre les digo -cuenta Raimundo- ¿Ah sí?, y Ferrán Adriá ¿no cree que de pequeño jugaba a las comidas?”. 

   Finalmente, Kamchatka es también una maravillosa librería en la que comprar cuentos especiales (en la estantería hay princesas que no van de rosa, monstruos que se enamoran, reinterpretaciones de los clásicos de Julio Verne…) de la que se encarga Nathalie; una tienda de muebles infantiles -por catálogo- de las mejores casas de fabricación europea; y una tienda online. Además, los primeros sábados de mes se organizan talleres, cuentacuentos, títeres o lo que se tercie.

   En cuanto a su nombre, la bautizaron Kamchatka en honor a la película argentino-española, de Marcelo Piñeyro, que cuenta la historia de una familia que, durante la terrible época de la dictadura militar argentina, decide protegerse de las persecuciones recluyéndose en una finca alejada de la ciudad. Esa finca es, para la familia protagonista de la cinta, un lugar donde resistir; lo mismo que la juguetería para Raimundo y Nathalie donde “un simple juguete de madera puede cambiar el mundo”.

PD: El juguete favorito de Raimundo es un muñeco de madera de Pinocho (que por sus marcas no deja duda de que ya es viejito) que le ha acompañado desde la inauguración de la tienda. Es fácil verlo apoyado en algún lugar de la misma, aunque, aviso a navegantes: ¡se va moviendo de sitio!

                                                   (De Noemí Z., el 25 de febrero de 2014)

Referencias útiles:
KAMCHATKA
Calle de San Agustín, 18
(esquina con la calle de  Lope de Vega, en el Barrio de las Letras)
28014 Madrid
913 763 614
M Antón Martín

Horario:
De lunes a viernes: de 10h30 a 14h y de 17h30 a 20h (pero el 02, 03 y 04 de enero no cierra a mediodía);
Los sábados: de 11h a 14h y de 16h30 a 19h, excepto los 1º sábados de mes (durante el Mercado de las Ranas), de 11h a 19h.

Para saber aun más sobre KAMCHATKA, conéctate a su web y su Facebook.

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