Emmy Hennings fue cantante, bailarina, actriz, poeta, narradora, diseñadora, performer… Pero la historia del arte del siglo XX se ha empeñado en catalogarla como “esposa de Hugo Ball” y musa de los artistas de las vanguardias. Para subsanar ese error, el historiador y traductor Fernando González Viñas y el ilustrador José Lázaro han unido sus fuerzas (re)creativas y han publicado la novela gráfica El Ángel Dadá, que narra la vida de esta interesante creadora, que se presentará hoy, Miércoles 25 de octubre de 2017, en la librería Panta Rhei.

   Como, a pesar de ese enorme talento, la vida y la obra de Emmy Hennings (1885-1948) es poco conocida, he aquí (Mi Petit) Diccionario para ir poniendo las cosas en su lugar.

ARABELLA Arabella era el nombre de la modesta compañía de variedades, formada por Emmy Hennings (retratada aquí) y Hugo Ball a principios del siglo XX. Tan modesta era que, en la mayoría de las ocasiones, se limitaba a ellos dos: Ball tocando el piano, Hennings interpretando las canciones, y los dos ocupándose del vestuario, la escenografía, las luces…

BALL, HUGO Una noche de 1913, el escritor alemán, Hugo Ball (1886-1927), asistió en Múnich a una de las representaciones en las que Emmy Hennings actuaba. Aunque se sentó en uno de los rincones de la sala, alejado del escenario, el enigmático joven totalmente vestido de negro no pasó desapercibido para la actriz. Al finalizar el espectáculo, Ball le propuso a Hennings participar en un montaje de Shakespeare que estaba organizando. Ella aceptó y, a partir de entonces, comenzarían una relación sentimental. Siete años después, un 21 de febrero de 1920, se casaron.

CABARET VOLTAiRE El Cabaret Voltaire era un pequeño café cantante, situado en el piso superior de un teatro de Zúrich. En dicho local, Emmy Hennings y Hugo Ball comenzaron a programar espectáculos de variedades, así como piezas de experimentación literaria, sonora y escénica. Entre los asiduos al local, se encontraba Tristan Tzara, creador de los manifiestos Dadá, por lo que se considera al Cabaret Voltaire como el lugar de creación de ese movimiento artístico. En 2002, después de años de abandono, un grupo de artistas decidió recuperar el local original y, en la actualidad, se celebran en él espectáculos, lecturas de poemas o presentaciones de libros.

DiE AKTiON Además de cantante y artista de variedades, Emmy Hennings era escritora y poeta. A principios de los años 10 del siglo XX, comenzó a colaborar en publicaciones como Die Aktion, revista literaria fundada por Franz Pfemfert en 1911 y adscrita a movimientos políticos de izquierdas, así como a vanguardias artísticas como el expresionismo. Además de Hennings, colaboraron en Die Aktion personajes como Grosz, Franz Marc, Matisse, Rosa Luxemburgo, Lenin, Trotsky, André Gide y Bakunin.

ÉTER Uno de los libros de Emmy Hennings fue Äthergedichte, que ha sido traducido al castellano como Las otras estrofas del éter. El sentido que se le atribuye al éter del título no es el poético. Es decir, que no se refiere a una cosa invisible, volátil o ligera, sino que habla directamente del compuesto químico de efectos narcóticos. De hecho, en el poema “Éter”, Hennings dice:

        La lluvia golpea las ventanas
        Una flor se ilumina de rojo
        El frío viento sopla contra mí
        ¿Estoy despierta o estoy muerta?
        Un mundo yace lejos, muy lejos.
        Un reloj da las cuatro
        No tengo ni idea del tiempo
        Me desplomo en tus brazos...

FLAMETTi Flametti o el dandismo de los pobres (Ed. Berenice) es un libro escrito por Hugo Ball en 1918, en el que cuenta los acontecimientos vividos por una compañía de variedades que se ve obligada a refugiarse en Suiza a consecuencia de la Primera Guerra Mundial. En el fondo, Flametti no es más que una suerte de memorias de las experiencias vividas por Ball y Hennings en Zúrich. Aunque los nombres están cambiados, es sencillo reconocer a algunos de los personajes, comenzando por el propio autor y siguiendo por Hennings, la actriz, pianista y cantante que es la estrella del espectáculo.

GREiL MARCUS Nacido en San Francisco en 1945, el crítico musical estadounidense, Greil Marcus, es uno de los escritores que mejor conocen la cultura popular del siglo XX. Autor del alabado Mystery Train (2013), en 1993 publicó Rastros de carmín, un libro editado en España por Anagrama, en el que repasa movimientos como el punk, el situacionismo o vanguardias como Dadá. En el apartado dedicado a este movimiento y al Cabaret Voltaire, Marcus describe a Emmy Hennings de la siguiente manera: “Apareció en el centro del cabaret con cintas alrededor del cuello, la cara como de cera. Con el pelo amarillo muy corto y un vestido de terciopelo escaso y oscuro y con rígidos volantes, era algo absolutamente distinto al resto de la humanidad. (…) Cubierta de maquillaje, hipnotizada con morfina, absenta y la llama color sangre de su eléctrica versión de Gloire, una violenta distorsión de lo gótico, su voz brinca sobre los cadáveres, se burla de ellos, trinando conmovedora como un canario flauta”.

HANNS BOLZ Nacido en 1885 en Aachen, región alemana fronteriza a Holanda y Bélgica, Hanns Bolz (1885-1918) fue uno de los pintores más destacados del expresionismo alemán. Conoció a Emmy Hennings en la ciudad de Múnich, en la que la escritora y artista actuaba en diferentes locales. En 1911, Bolz realizó el óleo de “Hennings”, en el que la escritora aparece con un sombrero azul y que tal vez sea su retrato más conocido.

iNAUGURACiÓN Un 05 de febrero de 1916 se inauguró en Zúrich el Cabaret Voltaire. Una de las actuaciones programadas era la de Emmy Hennings que, a pesar de estar en plena Guerra Mundial, no dudó en cantar “La danza de la muerte”, tema escrito por Hugo Ball y que Hennings interpretaba con la música de una popular tonada alemana. Según recordaba el periodista neerlandés Adrianus Baltus van Tienhoven en su texto “Una taberna de artistas en Zúrich”, “Emmy Hennings canta una canción de soldados de su amigo Hugo Ball, mientras su blanca, delgada cabeza semeja una calavera. Canta con una melodía sencilla, casi alegre y en cada verso se oye el sarcasmo y el odio al señor emperador, la desesperación de los hombres perseguidos en la guerra”.

JULiO ÁLVAREZ DEL VAYO Julio Álvarez del Vayo (1891-1975) fue un periodista, diplomático, periodista y militante del Partido Socialista Obrero Español, que llegó a ser ministro de los gobiernos de Largo Caballero y Negrín durante la Guerra (in)Civil. Tras la derrota republicana, Álvarez del Vayo tuvo que exiliarse a Francia, México y Estados Unidos desde donde continuaría su lucha antifranquista hasta el punto de fundar el grupo guerrillero FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriota). En 1917, cuando Del Vayo era corresponsal de guerra, coincidió con Emmy Hennings en Zúrich y se hicieron amantes. El romance finalizó cuando Ball persiguió al español por las calles de la ciudad apuntándole con un arma.

KANDiNSKY El pintor ruso, Vasili Kandinsky (1866-1944), fue otros de los artistas que coincidieron en Zúrich durante la época de la Primera Guerra Mundial. Kandinsky también frecuentaba el Cabaret Voltaire y a la pareja Hennings-Ball, hasta el punto de que en el local del Cabaret colgaban obras del pintor ruso. En esa época, como no era muy conocido a nadie le dio por llevarse los cuadros aprovechando un despiste.

LOCURAS La vida de Emmy Hennings no fue sencilla. Se casó muy joven y tuvo un hijo que falleció prematuramente. Tras la muerte de su esposo, tuvo otra relación de la que nacería una niña, a la que tuvo que dejar en varias ocasiones con la familia materna por no poder ocuparse de ella. Hennings se ganaba la vida cantando en locales de mala muerte y pasó épocas de verdadera miseria antes de convertirse en la musa de artistas, fundar el Cabaret Voltaire y colaborar en la creación de Dadá. Hacia 1920, Emmy Hennings se convirtió al catolicismo y prefirió olvidar toda esa vida, incluida la época dorada de Zúrich. Decía que eran “locuras de juventud”.

MORFiNA Hacia 1910, Emmy Hennings conoció en Colonia a John Höxter que, además de trabajar como periodista en diferentes publicaciones, se dedicaba al tráfico de estupefacientes. Él fue quien introdujo a la escritora en el mundo de la morfina, una droga muy de moda en la época y de la que poco se sabía. De hecho, su frecuente uso como narcótico para mitigar los dolores de los heridos de la Primera Guerra Mundial provocó posteriormente todo un ejército de adictos a la morfina en los años de entreguerras.

NOVELA GRÁFiCA El Paseo Editorial acaba de publicar la novela gráfica El Ángel Dadá, escrita por Fernando González Viñas e ilustrada por José Lázaro, que narra la vida de Emmy Hennings a lo largo de 9 capítulos y más de 200 páginas. El trabajo de González Viñas y Lázaro es fruto de un importante proceso de documentación que consigue presentar los hechos con la mayor fidelidad posible aunque para ello tengan que alejarse de la leyenda.

OTTO UMBEHR Otto Umbehr (1902-1980) fue un fotógrafo miembro de la Bauhaus que retrató a Emmy Hennings en 1930. La imagen, que en la actualidad forma parte los archivos de Getty Images, muestra a la artista superada la cuarentena, con una actitud reposada y un aspecto avejentado, al menos en comparación con el que la escritora muestra en la infinidad de imágenes de los años 1910 y 1920. De hecho, mientras que en esta época abundan las imágenes de Hennings, las fotografías de su edad madura son escasas.

PSEUDÓNiMO Durante su época de artista de variedades, Emmy Hennings utilizó el pseudónimo de Dagny. Este simpático apelativo procede de la tradición nórdica y significa “Nuevo día”.

QUESOS Suiza es uno de los países productores de queso más importante de Europa. Durante su estancia en Suiza, hubo épocas en las que Emmy Hennings y Hugo Ball pasaron verdaderas penurias económicas, lo que hace pensar que se tuvieron que hinchar a comer Tomme Vaudoise, Vacherin Mont d’Or, Tête de Moine, Bündner Bergkäse, Schabziger y otras variedades de queso suizo.

REViSTA Antes de ser un local de espectáculos, el Cabaret Voltaire fue una revista creada por el poeta y ensayista rumano, Tristan Tzara (1896-1963), de la cual solo se editó un número. En ella, Emmy Hennings publicó su poema “Morfina” que comenzaba con el verso “Esperamos la última aventura” y continuaba con otros como “Ya no revisamos el correo”, dos ejemplos de lo que es la cotidianidad de un adicto.

SiMPLiCiSSiMUS A principios de la década de los años 10 del siglo XX, Emmy Hennings trabajaba como artista de variedades en Simplicissimus, un local muniqués en el que en 1913 conocería a Hugo Ball.

TíTERES Entre los diferentes números que realizaba Emmy Hennings en su espectáculo, estaban los de títeres. Ella misma diseñaba y fabricaba las marionetas, algunas de las cuales se parecían a los figurines de los ballets Dadá o a los trajes que usaba Hugo Ball para sus experimentaciones sonoras.

URSONATE “La Ursonate” o “Sonata in Urlauten” es una pieza musical compuesta de sonidos guturales y primitivos, creada por Kurt Schwitters (1887-1948), uno de los artistas claves del Dadá berlinés, al menos hasta que lo expulsaron del grupo y fundó el Dadá de Hannover. Kurt Schwitters era amigo de Emmy Hennngs y Hugo Ball, al que también le daba por experimentar con ruiditos.

VERDAD “La araña que decía la verdad” era uno de los números que Hugo Ball y Emmy Hennings realizaban en el Cabaret Voltaire. La artista sacaba su cabeza a través de una tela negra y la colocaba en una especie de guiñol decorado como si fuera una tela de araña en la que también estaban las patas del artrópodo. La araña / mujer conversaba y respondía las preguntas que le eran formuladas por Hugo Ball, también presente en el escenario. Un número de feria de toda la vida, pero con un toque Dadá.

WERKMANUSKRiPTE La web helveticarchives contiene los documentos relacionados con la obra de Emmy Hennings que obran en poder del Estado helvético, país en el que falleció en 1848. Entre ellos, están sus werkmanuskripte (“manuscrito de trabajo” en alemán), de diferentes obras como Helle Nach (Noches brillantes) de 1922.

XENÓN El xenón es un gas noble que se utiliza en diferentes aplicaciones, principalmente aquellas relacionadas con lámparas, fluorescentes y otras fuentes de luz. El nombre de Cabaret Voltaire hace referencia a los arcos voltaicos, comúnmente conocidos como fluorescentes o neones. En otras palabras, el nombre del Cabaret Voltaire hacía referencia a un neón y probablemente su rótulo también fuera uno.

YACER Emmy Hennings y Hugo Ball yacen en una misma tumba del cementerio de la Iglesia de San Abbondio de Montagnola, en la localidad suiza de Lugano. El escritor falleció en 1927 y la escritora unos años después, en 1948.

ZÚRiCH Durante la Primera Guerra Mundial, Suiza se declaró neutral. Por esta razón, muchos centroeuropeos vieron en la Confederación Helvética el lugar donde refugiarse de la guerra. En esa época, en la ciudad de Zúrich coincidieron personajes como Tristan Tzara, Jean Arp, Francis Picabia y Lenin, muchos de los cuales acudían al Cabaret Voltaire fundado por Hugo Ball y Emy Hennings, que también habían buscado refugio en la ciudad huyendo de la guerra.

                                                (De Eduardo Bravo, el 25 de octubre de 2017)

Referencias útiles:
EL ÁNGEL DADÁ

¿CUÁNDO? El Miércoles 25 de octubre de 2017, de 19h30 a 21h.

¿QUÉ? Presentación de la novela gráfica sobre la escritora, poetisa y musa del mundo bohemio dadaista, Emmy Ball-Hennings + Charla literaria a cargo de Javier de Juan, que hablará con los autores Fernando González Viñas y José Lázaro y con el editor de la editorial El Paseo, David González Romero.

¿DÓNDE? En Panta Rhei (en la ilustración)
Calle de Hernán Cortés, 7
28004 Madrid
913 198 902
M Tribunal / Chueca

¿CUÁNTO? Entrada libre.

Para saber más del evento, conéctate a la web de la editorial EL PASEO (también en Facebook y Twitter).

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