Por cada 2 mujeres ingenieras hay 8 hombres ejerciendo la misma profesión. Los caminos recorridos por ambos hasta llegar al destino no van a ser idénticos. Sus nóminas tampoco, aun soportando la misma carga de trabajo y responsabilidad. Ingeniero e ingeniera tampoco serán igual de bien considerados, casi siempre en detrimento de la mujer, minoría -de momento- en el universo tecnológico. La fisura es un hecho en todos los sectores de la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Son las profesiones englobadas en el término STEM (elaborado con sus iniciales en inglés: Science, Technology, Engineering and Mathematics), donde la representación femenina es incompleta y no por falta de cerebros capaces. Faltan mujeres.

   Para remediarlo, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha establecido que el 11 de febrero sea el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Y para que la iniciativa no se quede en una arenga más, un grupo de mujeres y hombres, dedicados a la investigación, la docencia y la comunicación científica, han formado el colectivo 11 de Febrero, abarrotando agendas de citas con la ciencia.

   Talleres, visitas guiadas a laboratorios, charlas, monólogos, exposiciones, actividad en redes sociales, teatro y todo tipo de tareas divulgativas en centros educativos, pensando mucho en los niños, animando también a bibliotecas, librerías y medios de comunicación, y escaparates, a sumarse a esta celebración que transcurre globalmente  entre los días 1 y 15, del segundo mes del año.

   Julia Herrero (retratada aquí) forma parte de la coordinación del 11F y, además, es portavoz de la iniciativa. Enseña física a los cadetes de la Academia Militar de Zaragoza, luego, en sus aulas, el alumnado no es mayoritariamente femenino sino todo lo contrario. Sabe por experiencia que las mujeres, aun siendo buenas estudiantes, no culminan sus proyectos académicos como lo hacen los hombres. ¿En qué momento del trayecto se produce la fuga? “Cada historia es muy particular, pero yo diría que en casi toda la línea de tiempo. Lo comparo con una tubería que gotea por diferentes sitios. A las niñas nos acomplejan frente a la ciencia desde que somos pequeñas. Los asuntos “de números” nos provocan mucho más estrés porque, para empezar, los chicos manejan mejor los asuntos técnicos ya desde los juguetes que les asignan y junto a los que crecen”.

   Luego llega la terrible ansiedad de la adolescencia, donde se acentúa el sesgo. Más tarde, la maternidad. ¿Cuántos hombres solicitan una reducción de jornada buscando conciliación? Y si quieres conseguir una cátedra, “necesitas hacerte un buen currículo, y éste se enriquece con charlas o asistencia a cursos y congresos, a los que casi siempre llaman a los hombres. Poco a poco, las mujeres acaban por autoexcluirse”, sigue Julia Herrero, optimista sin embargo ya que “es la segunda edición de 11 de Febrero, y en un año he visto como mi agenda se desborda con nombres de mujeres científicas dispuestas a participar en este proyecto de divulgación. Ha sido una explosión. Un ejemplo: arrancamos programando 400 actividades, y hemos llegado al millar. Las mujeres somos muy buenas tejiendo redes”. 

   La percepción, que una gran mayoría tenemos de la ciencia, es poco terrenal. Si la evocamos, lo primero que cruza nuestra frente es un señor de bata blanca, con aire de tener la mente en otro mundo, mirando atentamente un microscopio o contemplando una probeta. Un genio ha de presentar un de aspecto alocado hasta la imprudencia, lejos de la impuesta sensatez femenina. Revivimos a Einstein, elaborando su críptica ecuación E=mc² que, para teorizar la relatividad, pero casi nadie pensará en Valentina Tereshkova, primera mujer cosmonauta, en la matemática Hipatia de Alejandría, en la primatóloga Jane Goodall, Bárbara MacClintock, destacada estudiosa de la genética, o en Ada Lovelace, otra maestra de los números. Como mucho, citaremos a Madame Curie.

   Por otro lado, “tampoco es exacto identificar ciencia con genialidad, porque no hace falta ser un superdotado para ejercerla. Tan necesario como un investigador ilustre es un médico de familia, que atienda eficazmente un consultorio. La genialidad puede estar en una mujer normal con la que cada día nos cruzamos por la calle. Y en esa imagen queremos que se vean  reflejadas las niñas que sueñan con formarse en estas disciplinas”, explica Julia Herrero. “Hay que apostar por la visibilidad tecnológica de la mujer. La ciencia necesita nuestra perspectiva para ciertos asuntos que resolvemos muy bien, hasta en lo más cotidiano: solo una mujer caerá en la cuenta de la necesidad de hacer cinturones de seguridad para embarazadas”.

   Las mujeres, más allá de la ciencia, necesitamos descubrirnos a nosotras mismas, pero en la tarea merecemos compañía. Educadores, políticos, empresas, familias. ¿Se animan?

                                                        (De Sol Alonso, el 08 de enero de 2018)

Referencias útiles:
ENCUENTRO MUJER Y CiENCiA

¿CUÁNDO? El Jueves 08 de febrero de 2018, (1) de 16h a 19h30, (2) a las 19h30 y (3) a las 20h.

¿QUÉ?
(1) Encuentro Mujer y Ciencia: "Incluidas en el Paraíso", Mujeres científicas y experiencias de género para abrir un debate conjunto entorno al papel que está desempeñando la mujer en la ciencia y cuáles han sido y están siendo los retos a los que se enfrentan día a día las investigadoras para incentivar la participación de las mujeres en el aprendizaje científico.

(2) Charla “La arqueología será feminista o no será”, a cargo de Margarita Sánchez Romero (Universidad de Granada).

(3) Charla “AstrofísicaS: de planetas a galaxias”, a cargo de Patricia Sánchez-Blázquez y Eva Villaver, doctoras en Astrofísica y profesoras del Departamento de Física Teórica de la Universidad Autónoma de Madrid.

¿DÓNDE?
(1) En la Sala de Conferencias de la Facultad de Ciencias UAM
(en la ilustración)
Ciudad Universitaria de Cantoblanco
Calle Francisco Tomás y Valiente, 7
28049 Madrid
C Cantoblanco Universidad

(2) En el Bar San Lorenzo (ver la ilustración)
Calle del Doctor Piga, 3
28012 Madrid
915 396 259
M Lavapiés

(3) En el Planetario de Madrid (ver la ilustración)
Avenida del Planetario, 16
28045 Madrid
914 673 898
M Méndez Álvaro / Arganzuela-Planetario

¿CUÁNTO? Entrada libre.

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