Con solo media entrada, y muchos más fans fuera que dentro de la Plaza de Toros de Las Ventas, Los Beatles debutaban en Madrid un 2 de julio de 1965. Los Pekenikes, entre otros, fueron sus teloneros, y a las 10h en punto de la noche, un entusiasta Torrebruno les recibía en un escenario, ornamentado en cartón piedra, más propio de una fiesta de cadetes de la OJE que de un concierto de pop rock. 

   Pedro Costa (retratado aquí, a la derecha), entonces estudiante de la Escuela Oficial de Cine, recibió el encargo de hacer un amplio reportaje sobre la estancia de los Beatles en Madrid y Barcelona, por encargo del director del NODO, José Luis López Clemente. La tarea fue mucho más que ardua. Las imágenes de la visita fueron censuradas, y el documental frustrado se quedó en apenas 10 minutos de micro reportaje. La prensa, al dictado del régimen, ninguneó el evento con titulares como “Los Beatles pasan por España sin pena ni gloria”.

   30 años después, en 1995, quiere la casualidad que alguien tropiece con aquella grabación casi por completo inédita, olvidada en el archivo del NODO. Cuando Pedro Costa localiza el material, decide editarlo junto a José Ramón da Cruz (retratado aquí, a la izquierda). ¿El resultado? Una película en la que, además de los asuntos musicales, relatan como era la España que recibió a “The Fab Four”, hace ya medio siglo. Esta noche, se proyectará por vez primera en la Filmoteca, y Mi Petit Madrid te adelanta algunos detalles inéditos...

   “¡Qué vienen los Beatles!” nos cuenta que el esperado concierto se celebró por los pelos. Brian Epstein, productor y manager de los cuatro melenudos de Liverpool, quiso incluir Madrid y Barcelona, en su gira mundial. Con la ayuda de un osado promotor, Francisco Bermúdez, comienzan las negociaciones para que el “She Loves You, Ye, Ye, Ye” sonara en directo en madrileñas Ventas y la Monumental de Barcelona.

   Firmar los contratos fue un embrollo. Resulta que a Carmen Polo de Franco, esposa del dictador, no le gustaban Los Beatles. Sentía auténtica inquina hacia el cuarteto y sus canciones, su fama de drogadictos, y sus escasos cortes de pelo. Y así, le hizo saber a Camilo Alonso Vega, Ministro de Información y Turismo, que esos chicos además de ser el Mal, solo sembraban el caos a su paso. Fechorías, desenfreno, chicas histéricas dispuestas a entregarles su virtud, depravación, y mil maneras más de pervertir a la ejemplar juventud de aquella España nuestra, educada en la blancura de espíritu, de espaldas a cualquier libertinaje.   Además, España e Inglaterra no caminaban precisamente de la mano. Por un lado, el asunto Gibraltar. Por el otro, la mala baba británica, obstinada en no darnos un mísero voto en el Festival de Eurovisión. Paracolmo, Lennon acababa de pronunciar ante la prensa americana, aquella frase blasfema, “Somos más famosos que Jesucristo”. ¿Cómo recibir a semejantes pecadores y seguir yendo a misa? 

   Pero, claro, suspender el concierto era una decisión pacata. La clase media española, levantaba ligeramente la cabeza, gracias al desarrollismo franquista, el auge del turismo, y la intervención del Opus Dei. Renunciando al evento, España perdía la oportunidad de parecer moderna. ¿Cómo ser un país yeyé sin ganarnos el infierno en el intento? 

   Los Beatles pisaron el aeropuerto de Barajas a las seis menos veinte de la tarde del día uno de julio: John Lennon con una gorra a cuadros; Paul Mac Cartney ensayando su mejor sonrisa; George Harrison con un bolsito en bandolera; y Ringo Star mascando chicle, con esas trazas suyas de estar completamente en Babia. 

   “La decisión fue tajante”, recuerda el cineasta Pedro Costa. “Hagamos que el concierto sea un fracaso por culpa de los músicos, y no de la censura”. El boicot arrancó con el precio de la entrada. 75 pesetas, la barata, y 400, la más cara. ¿Quién podía costear aquello? Lógicamente los niños ricos, el personal de la base americana de Torrejón de Ardoz, párvulos rockeros de la época -como Miguel Ríos-, nuestras adelantadas a su época (como Massiel, Rocío Dúrcal o Pilar Miró), y el descarado Micky, vocalista del grupo Micky y los Tonys¸ que se coló, alegando ante la policía, que ver a sus ídolos en directo, era una cuestión de vida o muerte.

   12 canciones después, con un sonido pésimo, con muchos agentes del orden en la plaza, y cargas policiales en el exterior, ¡ni un bis! Como escribió Edgar Neville: “Había tantos policías que, con uno más, se podría haber tomado Gibraltar”. “La consigna estaba clara”, recuerda Pedro Costa: “Los músicos no podían pisar la calle. Que lleguen, toquen, duerman y se vayan. Ni un contacto con las fans”.

   John, Paul, George y Ringo se hospedaron con su séquito en el Hotel Fénix de la Plaza de Colón, habitaciones 111 y 112. Para la rueda de prensa, se reprodujo una bodega jerezana en un salón del hotel, con las Hermanas Hurtado vestidas de faralaes, rompiendo a bailar sin gracia y sin motivo. Solo pasaron periodistas y fotógrafos con carne del régimen, y como recuerda Pedro Costa, las preguntas eran del tipo, “¿Conocéis a El Cordobés? ¿Quién os corta el pelo?”. Los chicos firmaron los barriles, y “refrescaron manzanilla”, gracias a la aportación etílica de Miguel Ángel Primo de Rivera, alcalde de Jérez, que aprovechó la coyuntura para posicionar la denominación del vino de jerez, frente al Sherry, of course.

   “¡Qué vienen los Beatles!” contiene eso y muchos más detalles de la visita fugaz, de Los Beatles (que ni llegaron a pisar los adoquines de la Plaza Mayor), y de la Celtiberia más profunda contra el rock and roll. Medio siglo después, parece que, por fin, en algo hemos cambiado.

                                                    (De Sol Alonso, el 02 de julio de 2015)

Referencias útiles:
¡QUÉ ViENEN LOS BEATLES!

¿CUÁNDO? El Jueves 02 de julio de 2015, a las 20h.

¿QUÉ? Proyección del documental “¡Qué vienen los Beatles!” (España 1965), de Pedro Costa y José Ramón Da Cruz, grabado entre en  Julio de 1965; y charla posterior con los directores, acompañados por el periodista y crítico musical, Jesús Ordovás (retratado aquí, en el centro de la ilustración), autor del libro John Lennon (2014).

¿DÓNDE? En el Cine Doré - Filmoteca Española
Calle de Santa Isabel, 3
28012 Madrid
913 691 125
M Antón Martín

¿CUÁNTO? Entrada libre.

PD: Y si quieres revivir el Concierto de Los Beatles de 1965, ¡no te pierdas…

¿QUÉ? El impactante show de The Bootles Beatles, en compañía de su Orquesta, procedentes del Reino Unido, compartiendo escenario con -como no- Los Pekenikes. 

¿CUÁNDO? El Jueves 02 de julio de 2015, a las 21h.

¿DÓNDE? En la Plaza de Toros Monumental de Las Ventas
Calle Alcalá, 237
28028 Madrid
917 264 800
M Ventas

¿CUÁNTO? Entre 25 y 45 euros aquí.

Para saberlo todo de la vista de Los Beatles a España, conéctate (en español) a la web 50º ANiVERSARiO DE LOS BEATLES EN ESPAÑA (también en Facebook y Twitter).

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