A primera vista, la literatura pulp es un saco en el que cabe de todo. Desde el misterio, la novela policiaca, el folletín romántico, los relatos de terror, los episodios bélicos, el erotismo o la ciencia ficción. Sin embargo, estas publicaciones de estructura sencilla, breves, trepidantes, a precios muy económicos y cuya única intención es divertir y entretener al lector, han dado lugar a grandes obras y personajes míticos, y han servido de campo de pruebas a grandes escritores con textos que habían sido rechazados por el mercado generalista por resultar demasiado provocativos, innovadores o crudos.

   Justamente por su falta de prejuicios, por su explotación de los temas más abyectos, por elevar a la categoría de arte las cuestiones más prosaicas de la vida, por su abuso del tópico, por su sentido del humor, por saber adaptarse mejor que muchos otros géneros a los cambios sociales y por mil cosas más, ¡no te pierdas (Mi Petit) Diccionario del Pulp.

ARTE El debate sobre si la literatura pulp es arte o no está más que superado desde el momento que se dejó de hablar de la alta y la baja cultura. En el pulp hay grandes obras y grandes autores y pésimas obras y pésimos autores. Exactamente igual que en la literatura académica o mainstream. Además de su valor literario, el pulp tiene una gran calidad gráfica. Para este tipo de productos, las editoriales especializadas recurrían a llamativas portadas en las que grandes ilustradores sugerían algunas de las cosas que el lector encontraría en el interior. Desde mujeres ligeras de ropa hasta peleas, juergas, asesinatos, amor incondicional, secuestros, robos, extraterrestres, criaturas fantasmales o cualquier otra cosa que excitase la imaginación del lector... Como en la literatura erudita, lo importante era vender el producto. Que se leyera o no, era lo de menos.

BiBLiAS DE TiJUANA A pesar de su nombre, las denominadas Biblias de Tijuana ni procedían de México, ni eran, precisamente, textos religiosos. Se conocía con ese nombre a pequeños libritos cuyo contenido eran historias pornográficas protagonizadas por populares personajes de cómic -como Betty Boop, Popeye y Dick Tracy- o estrellas del Hollywood de la época caricaturizadas. Originarias de Estados Unidos, estas “biblias” alcanzaron su máxima popularidad en la década de los años 20 y 30, llegando a vender decenas de miles de ejemplares de algunos de sus títulos, a pesar de su precaria impresión -en papel de pulpa, a una tinta y con grapa- y de su distribución clandestina, debido a que eran consideradas obscenas. El éxito de ese fenómeno editorial hizo que otros países imitasen el formato. Brasil, por ejemplo, contó con verdaderos artistas del género. Es el caso de Carlos Zéfiro, que trabajaba por las mañanas como funcionario y por las noches daba rienda suelta a su tórrida imaginación y su pincel. A pesar de la venta clandestina de sus obras, la influencia de Zéfiro en la sociedad brasileña fue tal, que uno de sus dibujos fue elegido por Marisa Monte para la portada de uno de sus discos. Como era de esperar, la portada fue censurada.

CORiN TELLADO Poca gente sabría decir quién es María del Socorro Tellado López (1927-2009). Sin embargo, son millones los lectores que han llorado, se han reído, han sufrido y disfrutado con las historias de amor escritas por esta asturiana. Bajo es pseudónimo de Corín Tellado, María del Socorro escribió, entre 1946 y 2009, alrededor de 5.000 novelas románticas con ciertos toques de erotismo, de las cuales se llegaron a vender más de 400.000.000 ejemplares en todo el mundo. Una cifra que le hizo entrar en el Libro Guinness de los Récords y ser nombrada por la UNESCO la escritora española más leída después de Miguel de Cervantes. Autores como Guillermo Cabrera Infante alabaron y estudiaron la obra de esta escritora, que es uno de los mejores ejemplos de pulp, no solo español sino internacional, gracias a las traducciones de sus obras a más de 20 idiomas.

DASHiELL HAMMETT Como muchos otros autores de novela negra, el escritor estadounidense Samuel Dashiell Hammett (1894-1961) comenzó su carrera en las revistas pulp dedicadas al género policiaco. Sus primeros trabajos se enmarcan en el género conocido como hard boiled, caracterizado por su crudeza y su violencia, pero poco a poco fue decantándose por un estilo más contenido y elegante. Entre sus personajes, se encuentran el detective Sam Spade -protagonista de El halcón maltés- o el Agente de la Continental, empleado de una empresa de detectives de San Francisco que, a pesar de protagonizar más de 20 títulos, nunca se llega a conocer su nombre.

ESTEFANíA Aunque nacido en Toledo, Marcial Lafuente Estefanía (1903-1984) pasó casi toda su vida en el Oeste norteamericano, al menos literariamente hablando. Hijo de un notable abogado y periodista toledano, Marcial estudió Ingeniería Industrial, profesión que ejerció hasta el estallido de la Guerra (in)Civil, en la que luchó del lado de la República con el grado de General de Artillería. Al finalizar la contienda, decidió no exiliarse, lo que hizo que fuera encarcelado en diferentes prisiones. Cuando fue liberado a principios de los 40, no pudo continuar con su profesión de ingeniero y tuvo que optar por la literatura. Comenzó a publicar en una pequeña editorial gallega novelas policiacas y románticas, pero fue el género del Oeste el que le proporcionaría la fama. Contratado por la Editorial Bruguera, llegó a escribir casi 3.000 novelas que se publicaban con periodicidad semanal en España e Hispanoamérica. Consciente de que sus novelas se leían en el continente americano, Estefanía fue muy concienzudo con los detalles históricos, para lo cual se documentó en libros y enciclopedias, aunque, por lo demás, su literatura era sencilla y directa. Mucha acción, interesantes diálogos y pocas descripciones.

FORRESTER, GLENN Junto a Johnny Garland, Addison Starr, Donald Curtis, Kent Davis, Don Harris, Elliot Turner y Curtis Garland, Glenn Forrester fue uno de los pseudónimos del escritor barcelonés, Juan Gallardo Muñoz (1929-2013), que escribió más de 2.000 novelas pulp de géneros tan dispares como el policiaco, la ciencia ficción, el terror, las artes marciales o el thriller histórico, para editoriales como Toray, Rollán y Bruguera. En 2001, la editorial catalana Morsa publicó Yo, Curtis Garland, en la que Gallardo Muñoz recordaba su carrera como autor pulp y las trepidantes jornadas de escritura, para poder entregar en fecha a la editorial una o dos novelas de casi cien páginas a la semana.

GUERRA MUNDiAL (II) La literatura pulp vivió su momento de esplendor en los años 20 y 30 del siglo pasado gracias a la popularidad de las revistas de relatos. En esa época, el cine y la radio todavía no habían invadido los salones de nuestras casas y la lectura era una de las diversiones más extendidas y económicas hasta el estallido de la II Guerra Mundial, que supuso un duro golpe para esta industria. En efecto, la restricción de papel hizo que se redujeran las tiradas y se ampliase la periodicidad de las publicaciones. Finalizado el conflicto, el éxito del cine, la radio y la televisión hizo que el público prefiriera esas diversiones, algunas de las cuales, como el cine de serie B, no era más que la traslación del espíritu pulp al séptimo arte. Finlamente, la sociedad se volvió mucho más puritana y comenzó a perseguir aquellas publicaciones que consideraba obscenas, violentas o inapropiadas para la moral de la época. A pesar de todo, durante los años 50 y 60, la literatura pulp continuó funcionando, aunque el número de revistas periódicas y sus tiradas nunca volverían a ser las de antes de 1939.

HOMOSEXUALiDAD En los años 40 y 50, la literatura pulp ya abordaba temas que la industria editorial mainstream no se atrevía a tocar. Entre ellos, se encontraba la homosexualidad -tanto entre hombres como mujeres-, que se mostraba de forma más o menos explícita a través del intenso compañerismo de un par de soldados en las trincheras, de la buena relación de un par de amigas que pasan sus vacaciones alejadas de sus padres o de un par de cowboys que cabalgan juntos en mitad de las montañas. Lo que “Brokeback Mountain” hizo en el siglo XXI, la literatura pulp gay ya lo había hecho en el XX. La pareja de artistas Gilbert & George (ver la ilustración) son unos grandes aficionados a este tipo de novelas, como explican en el documental “Con Gilbert+George”, rodado en 2008 por Julian Cole.

iNTERNACiONAL Aunque se suele asociar la literatura pulp con la cultura anglosajona, lo cierto es que en casi todos los países del mundo hay un equivalente a ese tipo de publicaciones. En la España de los años 20 y 30 del siglo XX, revistas como La Novela de Hoy o La Novela Corta publicaban obras de autores de Álvaro Retana, Joaquín Belda o Emilio Carrere, en las que era habitual encontrar personajes homosexuales, crímenes, brujería, fantasmas y alguna que otra droga como el éter o la cocaína. En Alemania, ese tipo de publicaciones se las conocía como kimi, y en Italia el género giallo (porque los cantos de los libros estaban tintados de amarillo) define desde hace décadas los libros de terror, misterio y crímenes.

JOSÉ MALLORQUí Después de una infancia desgraciada y solitaria a consecuencia del abandono de su padre, la muerte de su madre y su internamiento en un centro educativo de salesianos, José Mallorquí Figuerola (1913-1972) comenzó a trabajar en la editorial Molino. Para dicha empresa traduciría novelas del inglés y del francés, y escribiría algunos relatos cortos a imitación de los que se publicaban en las revistas extranjeras como Weird Tales, cuya versión española dirigiría con el título de Narraciones terroríficas. Además de historias de detectives y espanto, Mallorquí comenzó a escribir historias del Oeste, para las que inventó un personaje que recordaba a El Zorro y que él llamó, en un alarde de imaginación, El Coyote. Entre 1943 y 1953 publicó casi 200 títulos de El Coyote, el cual sería también adaptado al cómic con dibujos de Francisco Batet y guiones del propio Mallorquí. El Coyote es tal vez el personaje más conocido de novela pulp española, no solo por su éxito tanto en nuestro país como en Hispanoamérica, sino por ser la lectura favorita del dictador Francisco Franco...

KARL VON VEREiTER Bajo este pseudónimo de aristócrata alemán, se escondía Enrique Sánchez Pascual (1918-1996), guionista de cómic y escritor de novelas pulp, especialmente las de explotación del universo nazi y la Segunda Guerra Mundial. Como otros muchos autores de literatura popular, Sánchez Pascual había optado por esa profesión por casualidad y necesidad. Tras la Guerra (in)Civil, en la que luchó en el bando republicano, tuvo que exiliarse a Francia donde se casó y tuvo un hijo -Sánchez Abulí, guionista del cómic Torpedo 1936-. A su regreso a España, fue detenido y encarcelado, debiendo desempeñar diferentes trabajos, entre ellos, el de escritor. Entre sus títulos destacan Yo fui huésped de los campos rusos, Objetivo: el infierno, Burdel SS, Las diabólicas de Hitler y Las vestales del Tercer Reich, en los que mezcla violencia, sexo, drogas, esvásticas y excesos varios.

LOVECRAFT, H.P. El genio del terror, Howard Phillips Lovecraft (1890-1937), nacido en Providence, también fue uno de los escritores destacados de la literatura pulp. Sin ir más lejos, su criatura Chtulhu vio por primera vez la luz en 1926 en la revista Weird Tales, una publicación popular y barata dedicada al género de misterio y espanto. A pesar de ser considerado un renovador del terror, el escritor estadounidense pasó importantes penurias económicas durante su vida. Al hecho de que las novelitas pulp no eran demasiado rentables, se sumaron la crisis de 1929 y la necesidad de Lovecraft de crear relatos cada vez más extensos, lo que provocaba que no fuera posible incluirlos en las revistas populares. A pesar de no ser excesivamente conocido en vida, tras su muerte, infinidad de autores reconocieron su valor, haciendo suyos muchos de los planteamientos creados por él, desde el concepto de horror primordial hasta la existencia de la universidad de Miscatonik, en cuya biblioteca estaría una copia del Necronomicón, el libro maldito por excelencia.

MEN’S ADVENTURE La cabecera Men’s Adventure, que se publicó desde los años 40 y hasta los 70 en Estados Unidos, fue una de las revistas clásicas del pulp. Caracterizada por unas impactantes y sugerentes portadas, en su interior se sucedían historias cortas sobre guerra, espías, criminales, detectives, extraterrestres y, ¡cómo no!, mujeres explosivas. Entre sus colaboradores se encontraban autores que posteriormente destacaron en el mundo literario, como el creador de James Bond, Ian Fleming; el autor de Crónicas Marcianas, Ray Bradbury; o el autor de El Padrino, Mario Puzo. A principios de 2000, la editorial Taschen recopiló en varios volúmenes algunas de las mejores portadas de Men’s Adventure y otras publicaciones pulp.

NAZiS La iconografía del partido nazi y las locuras realizadas por sus miembros, antes, durante y después de la Segunda Guerra Mundial, fueron una fuente infinita de argumentos para las novelas pulp. Desde Científicos locos, como el Dr. Mengele, capaces de hacer experimentos con hombres y animales salvajes, a morfinómanos como Göring, pasando por personajes como Hitler y Boorman, que podrían haber burlado a los aliados y huir a Argentina para continuar con sus atrocidades, sádicos miembros de las SS sedientos de sexo, batallas contra el Ejército rojo… Los nazis lo tenían todo para aderezar con éxito una novela de explotación. Además, a pesar de todas sus salvajadas, las historias siempre acababan bien, porque eran derrotados por los norteamericanos y sus aliados. Bueno, no siempre: El hombre en el castillo (1962), de Philip K. Dick, presentaba un futuro en el que Hitler y los suyos habían ganado la guerra y dominaban el mundo junto al aliado japonés.

ORiENTE Oriente es un lugar recurrente para ambientar las novelas pulp. Por lo exótico del lugar y por la fama de malvados que la cultura colonialista europea difundió sobre los nativos de esos países. De Oriente es originario el malvado Fu Manchú, personaje creado por Sax Rohmer en 1913. También es oriental el detective Charlie Chan, creado por Earl Derr Biggers en 1929. En Oriente se produjeron las guerras del Opio y, por si no fuera suficiente, el hecho de que Hitler y los japoneses se confabulasen para acabar con la sociedad occidental, también ayudó para que Oriente fuera un referente que encajaba como un guante con el universo pulp.

PULPA La denominación “pulp” no responde a un determinado género literario, sino que responde al tipo de papel utilizado para su impresión, más concretamente, la pulpa de celulosa muy poco elaborada, de aspecto tosco, pero muy barata de producir, con la que se imprimían libros de formato pequeño y encuadernados con grapa y/o tapa blanda.

QUEER Pulp Queer es un libro publicado en 2001 por Chronicle Books en el que la escritora Susan Stryker, activista y miembro del departamento de estudios sobre la mujer de la Universidad de Berkele, analiza el fenómeno de la literatura pulp gay, lesbiana, transexual y bisexual. Un texto enfocado desde el punto de vista científico y académico, que se adereza con una amplia variedad de portadas de esas novelas, las cuales sugieren claramente, pero con mucha elegancia, lo que el lector se iba a encontrar al leer el libro.

RAYMOND CHANDLER El creador del investigador Phillip Marlowe también comenzó a publicar en revistas pulp. Su vocación como escritor fue tardía, superada ya la treintena, e imitando el estilo de Dashiell Hammett, que también publicaba en esas mismas revistas. El debut de Raymond Chandler (1888-1959) se produjo en la revista Black Mask y no sería hasta 1939, con más de 50 años, cuando aparecería su primera novela: El sueño eterno. Sus libros fueron llevados al cine en diferentes ocasiones, e incluso él mismo colaboró con Hollywood para escribir los guiones de Perdición, de Billy Wilder, o Extraños en un tren, de Alfred Hitchcock.

SELVA Los escenarios exóticos suelen acoger muchas de las historias de la literatura pulp. Además de ser un recurso que transporta a los lectores fuera de su aburrida realidad, el hecho de describir sobre lugares que pocos conocen permite una mayor libertad creativa (por no decir que es la garantía para cometer todo tipo de tropelías relativas a la fauna, la flora o las costumbres de la zona). Uno de los escenarios exóticos más populares en las novelas pulp es la selva, lugar en el que habita Tarzán de los monos, personaje creado en 1912 por Edgar Rice Burroughs para la editorial All-Story Magazine.

TARANTiNO El realizador estadounidense Quentin Tarantino (1963) es un apasionado de la cultura popular en casi todas sus manifestaciones. En 1994 rodó “Pulp fiction” (ver la ilustración), una historia llena de sexo, violencia y drogas, que se convirtió en su personal homenaje a las novelas baratas policiacas y de misterio. De hecho, el cartel de la película imitaba la portada de una de esas novelas castigada por el uso, con las esquinas dobladas y zonas del papel rasgadas.

UBiK En 1969, Philip K. Dick (1928-1982) publicó Ubik, una de sus novelas más conocidas junto a El hombre en el castillo (1962) y ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (1968). En esta ocasión, el libro fue publicado por la editorial neoyorquina Doubleday por todo lo alto, con sobrecubierta y tapa dura. Un hecho poco habitual en un escritor que, como otros muchos autores de ciencia ficción, había publicado el grueso de su obra en revistas pulp. La reciente recopilación, por parte de la editorial Minotauro, de sus narraciones breves aparecidas en esas publicaciones ha dado lugar a 4 tomos de unas 500 páginas cada uno.

VALDEMAR La editorial madrileña Valdemar, especializada en cultura popular, novela gótica y terror, ha prestado especial atención a la novela popular norteamericana. En 2009 publicaron Los hombres topo quieren tus ojos y otros relatos sangrientos de la era dorada del pulp, una selección realizada por Jesús Palacios en la que se incluyen títulos que fueron éxitos del género en la década de los 30 en Estados Unidos, como Momias a la carta, de E. Hoffmann Price; Sangre para el vampiro muerto, de Robert Leslie Bellem, y el relato que da título a la colección, Los hombres topo quieren tus ojos, de Frederick C. Davis. Para los que aún tengan ganas de más, el catálogo de Valdemar incluye Las estrellas mueren de noche y otros casos de Dan Turner, detective de Hollywood, libro de relatos policiacos pulp escrito por Robert Leslie Bellem, y la obra completa de H. P. Lovecraft.

WEiRD TALES Centrada en el género de ciencia ficción, fantasía y terror, Weird Tales es una de las cabeceras clásicas de la literatura pulp. En ella han publicado autores como H. P. Lovecraft, Robert Block (autor de Psicosis) o Robert E. Howard (creador de Conan el Bárbaro). Publicada por primera vez en 1924, Weird Tales ha pasado por momentos de enorme popularidad y épocas de graves problemas financieros, como los que provocaron su cierre en 1954. Sin embargo, el prestigio de la cabecera hizo que fuera rescatada en 1988, permaneciendo en activo hasta la actualidad con una periodicidad bimestral.

X El descubrimiento de los rayos-X no solo amplió el campo de la ciencia médica, sino que permitió hacer realidad el deseo que toda persona tiene de poder ver a través de los objetos. Un hecho que ha servido de base para mil y una historias tanto de pulp como de cómic, pues uno de los superpoderes de Superman es ver a través de los objetos. El mejor ejemplo del uso de los rayos X en una historia llegaría de la mano de Roger Corman y su película de 1963, El hombre que tenía rayos X en los ojos. Una cinta heredera de ese espíritu pulp, que se ha convertido en un clásico de la serie B.

YONQUi La famosa novela de William S. Burroughs fue originalmente publicada por una editorial especializada en novelas pulp. A pesar de los esfuerzos de Allen Ginsberg por encontrar un editor para el libro, a mediados de los años cincuenta ninguna compañía se atrevió a poner en el mercado un texto en el que se hablaba abiertamente de las drogas, la homosexualidad, el alcohol y la represión policial. Finalmente fue ACE, editorial especializada en pulp que distribuiría sus libros en lugares como el metro, la que se decidió a publicarlo en 1953. Lo hizo con el subtítulo de “Confessions of an unredeemed drug addict” (“Confesiones de un adicto a las drogas irrecuperable”) y con Burroughs oculto tras el pseudónimo de William Lee.

ZORRO En 1919 el escritor Johnston McCulley (1883-1958) creó el personaje de El Zorro, identidad secreta tras la que se ocultaba Don Diego de la Vega, un aristócrata mexicano que se dedicaba, junto a su criado sordomudo Bernardo, a defender a los menesterosos de los abusos de los terratenientes, las autoridades tiránicas o los bandidos. Su primera aventura apareció en la revista pulp All-Story Weekly, pero el éxito del personaje hizo que, apenas un año después, fuera adaptado al cine interpretado por Douglas Fairbanks, quien por vez primera vistió el clásico traje del personaje: traje, capa, sombrero y antifaz negro.

                                        (De Eduardo Bravo, el 02 de noviembre de 2016)

Referencias útiles:
SHE WAS SO BAD!

¿CUÁNDO? El Miércoles 02 de noviembre de 2016, de 20h a 23h.

¿QUÉ? Presentación de She was so bad!, una antología pulp, publicada por Aloha Ed., que recoge relatos fantásticos, de terror, suspense y sexo, escritos por más de 20 escritoras contemporáneas, de todas las edades y de diferentes puntos geográficos, incluso originarias de otros países, como María Fernanda Ampuero (Ecuador) o Lucy Leite (Brasil), o narradoras españolas que viven fuera, como Sylvia Ortega (Francia) o Julia González Calderón y Tania Panés (Estados Unidos).
PD: El título de este libro tamaño single sale de un recopilatorio de rarezas -She Was so Bad es una canción del grupo de garage de los 60 Blue Embers-.

¿DÓNDE? En La Central de Callao 
Calle del Postigo de San Martín, 8
28013 Madrid
917 909 930
M Callao

¿CUÁNTO? Entrada libre.

Para saber más del evento, conéctate a la web de LA CENTRAL DE CALLAO (también en Facebook y Twitter).

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